Arquitectura interior Olivier Lempereur
Estilismo decoración Hélène Guillon
Una entrada muy discreta, una escalera que conduce a un patio interior, un pequeño ascensor que llega a este apartamento o el encanto y el asombro operan inmediatamente. Verdadero remanso de paz a orillas del Sena, prácticamente frente a Notre Dame, este tríplex bordeado de magníficas terrazas aspira a la serenidad y a la calma en pleno corazón de París. Desde un apartamento muy complicado, dividido en varias unidades en varios condominios, el arquitecto de interiores ha logrado hacer que las circulaciones sean fluidas imaginando el plano perfecto.
La escalera dibujada como una escultura es la verdadera columna vertebral de este lugar, su implantación ideal permite a los espacios convivir con un verdadero placer y facilidad de vivir. En tres plantas, este lugar de vida con un encanto discreto y elegante es el reflejo de las pasiones de los propietarios, las artes primitivas y los comics se codean con magia gracias a un encuentro imaginado desde la génesis del proyecto.
Las vistas, los espacios exteriores dan al lugar una magia insospechada gracias a la creación de grandes aperturas realizadas en concertación con los Edificios de Francia, qué es más increíble que los espacios interiores extendidos en el exterior.
